viernes, 1 de junio de 2007

Antes de entrar ya siento que hay algo distinto

Nunca me había parado a pensar en ese breve trayecto que va del taxi a la cama, pero condiciona mucho la manera en la que uno se va a dormir después de una noche de copas.

Del taxi a casa de mis padres todo era paz y silencio. Todo invitaba a soñar con la cama. Sobre todo cuando por el camino se cruzaba alguna niña a la que la inexperiencia y las copas apenas le permitían tenerse en pie sobre sus tacones.

El caso es que esta noche todo ha sido ruido y gente que iba más que venía. Además, no he visto a ninguna adolescente haciendo equilibrios. Espero acostumbrarme, pero creo que no me gusta.

Adolescente. Leo una y otra vez esta palabra y me siento raro.

La primera noche ha sido divertida. N ha aparecido a última hora con el plan perfecto: concierto de La Habitación Roja en la fiestas de Hortaleza. El concierto ha estado bastante bien, aunque lo mejor ha sido volver a montarme en el pulpo. Por cierto, qué atracción tan legendaria el pulpo... ¿No?

No hay comentarios: